Mitos y verdades sobre la navidad
24 de Diciembre de 2014
Cinco mitos sobre la Navidad
¿Por qué muchos historiadores sostienen que Jesús no nació el 25 de diciembre? ¿Quién fue Papá Noel? ¿Cuántos eran los Reyes Magos? Muchas de las costumbres que practicamos durante la Navidad no serían como creemos que son. Sus orígenes, en base a varios estudios realizados, nos pueden llegar a sorprender.
El árbol del milagro
Muchas personas arman el arbolito sin saber por qué lo hacen, ni qué significa, pero cumplen con esa tradición religiosamente todos los 8 de diciembre. Otras lo relacionan con la figura de Papá Noel, sin embargo, sus orígenes se remontan al siglo VIII, según relata la leyenda más conocida, cuando San Bonifacio fue a Germania para convertir paganos al cristianismo. En una noche de Navidad, los germanos intentaron sacrificar un niño debajo de un árbol y San Bonifacio, furioso, arrancó el tronco de raíz y emergió de ellas un pino. Con su acción, no solo salvo la vida del niño, también logró que la mayoría de los presentes se convirtieran al cristianismo, ya que lo consideraron un acto milagroso. Pero fue recién en el siglo XVI que se empezaron a colocar los árboles de Navidad dentro de los hogares. La tradición pasó a Gran Bretaña, de allí a Estados Unidos y de ahí llegó a América Latina.
Los magos no eran reyes
“Cuando Jesús nació en Belén de Judea en días del rey Herodes, vinieron del oriente a Jerusalén unos magos, diciendo: ¿Dónde está el rey de los judíos que ha nacido? Porque su estrella hemos visto en el oriente, y venimos a adorarle. Oyendo esto, el rey Herodes se turbó, y toda Jerusalén con él.” –Mateo 2:1-3. El evangelio de San Mateo es el único que menciona la figura de los magos, pero no da sus nombres y tampoco cuantos eran. Fue en el siglo III, cuando Quinto Tertuliano menciona por primera vez a los magos como reyes o de estirpe real. Posteriormente, durante el siglo IV, se estableció que sean tres, en representación al oro, incienso y mirra, y se conocieron sus nombres. La figura del rey negro Baltasar nació en el siglo XVI, se cree que por razones ecuménicas, e incluso en ocasiones se lo representó como Jefe Indio. Según diferentes historiadores, con la imagen de los tres Reyes Magos se pretendió otorgar universalidad a la llegada Jesús. En actualidad, millones de niños aguardan su llegada cargada de regalos.
De Turquía al Polo Norte
La historia de Papa Noel, también llamado San Nicolás, Santa Claus o Padre de Hielo, está íntimamente relacionada con el Santo Nicolás de Bari, quien nació en Turquía en el siglo IV en el seno de una familia adinerada. Luego del fallecimiento de sus padres, a los 19 años decidió donar su fortuna y dedicar su vida al sacerdocio. San Nicolás falleció el 06 de diciembre del año 345 y la razón que se lo represente con una bolsa, repartiendo regalos, se originó cuando supo que la hija de un vecino iba a casarse y como su padre no tenía dinero para la fiesta, decidió entregarle una bolsa de monedas de oro. A partir de ese gesto de bondad, comenzó la costumbre de intercambiar regalos en navidad, sin embargo, su aspecto físico era muy distinto al que conocemos en la actualidad; era alto y delgado. Su historia e imagen fueron cambiando con el tiempo y muchos de esos cambios son atribuidos a invenciones estadounidenses. El primer gran cambio fue en 1823, cuando el escritor Clement Moore escribió el poema, “Una Visita de San Nicolás”, en donde lo recrea sobre un trineo tirado por 9 renos, en vez de repartir los regalos montado en un caballo como se conocía hasta ese momento. La segunda modificación importante se produjo en 1931, cuando una conocida marca de refrescos encargó a un caricaturista que creara un Papá Noel más humanizado. Así surgió como lo conocemos hoy en día, vestido de rojo, con cinturón y botas negras. Hoy se dice que vive en el Polo Norte y con la ayuda de muchos duendes prepara los regalos para todos los niños.
¿Cuándo nació Jesús?
Existen varias teorías que sostienen, incluso de autores cristianos, que el nacimiento de Jesús no fue el 25 de diciembre, como cree la mayoría, y se cree que se eligió esa fecha para festejar la llegada de Cristo porque coincidía con la fiesta pagana que se realizaba, previo a su llegada, por el nacimiento del sol. Era el día en que los romanos celebraban la festividad del “nacimiento del sol invicto”, Mitra (Mithras), el alargamiento del día frente a la noche invernal, la victoria de la luz sobre las tinieblas. Esta misma tesis es admitida por numerosos autores cristianos. Credner, en 1833, señalaba: “Los Padres transfirieron la conmemoración del 6 de enero al 25 de diciembre porque la costumbre pagana quería que se celebrara en esta fecha el nacimiento del Sol, encendiendo velas en signo de alegría, y porque los cristianos tomaban parte en estos ritos y festejos. Cuando los doctores vieron cuán ligados seguían los cristianos a esta fiesta, tomaron la decisión de hacer que la Natividad se celebrara en este día”. La tradición dice que la fiesta de la Navidad fue instituida por el papa Julio I, pero no hay ningún documento que permita asegurarlo. Por eso algunos estudiosos del tema sostienen que bajo el reinado del emperador de Occidente Honorio, entre los años 395 y 423, fue cuando el 25 de diciembre se convirtió en fiesta religiosa, puesta en pie de igualdad con la Pascua y la llegada de los reyes magos. Pero no será hasta el año 440 cuando la Iglesia decida oficialmente celebrar el nacimiento de Jesús en esa fecha. Aun así, ésta no se constituirá fiesta obligatoria hasta que así lo decida el Concilio de Agde, en el 506. Y habrá que esperar al año 529 para que el emperador Justiniano lo instituya como día festivo.
Nápoles impuso Pesebre
San Francisco de Asís es el gran artífice del origen de la actual tradición del armado de los pesebres o nacimientos. En 1223 obtuvo un permiso papal para celebrar la misa de Nochebuena de una manera original. En el bosque de Greccio, cerca de Roma, dispuso un altar junto a una cueva, en la que había algunos animales domésticos y un pesebre con heno, para el reposo del Niño Jesús. Ante el éxito que consiguió la celebración, los franciscanos la adoptaron para la celebración de la Navidad. A partir del renacimiento, los pesebres, tal cual los conocemos hoy, se comenzaron a realizar fuera de los conventos, iglesias y monasterios. Sin embargo, la contrarreforma protestante frenó esta manifestación religiosa, que solo los jesuitas mantuvieron viva en el reino de Nápoles. Fue el monarca de esa ciudad italiana y futuro rey de España, Carlos III, quien impulsó su instalación en los hogares fuera de los recintos religiosos cuando ordenó construir un pesebre en uno de los aposentos de su palacio. Ya en España, encargó a unos artistas valencianos uno igual para su hijo. A partir de ese momento, el pesebre se popularizó por todo el reino y se convirtió en una tradición muy arraigada, sobre todo en la Europa Mediterránea y América.
25 de Diciembre de 2014
Estudiosos de la Biblia sugieren que no debería festejarse la Navidad
Algunos especialistas afirman que debería estar religiosamente prohibido celebrar la Navidad en la fecha habitual, ya que en ninguno de los evangelios se menciona cuál fue el día exacto del nacimiento de Cristo. Estos exegetas, algunos de los cuales pertenecen al grupo de los Testigos de Jehová, señalan que el mes de diciembre es demasiado frío en el hemisferio norte como para que los pastores hayan estado cuidando a sus ovejas en el campo, como narra el relato evangélico. Esto contradice, por supuesto, el concepto compartido por casi todos los cristianos, que desde el siglo IV festejan la Navidad el día 25 de diciembre, teniendo en cuenta que ese día tiene lugar el solsticio de invierno, celebrado como el nacimiento anual del dios Sol; siendo Cristo “la luz del mundo” y “el sol que nace de lo alto para iluminar a los que viven en tiniebla y en sombra de muerte”, la fecha se vincularía a un contenido metafórico más que a un acontecimiento verificable. Por su parte, astrónomos proponen que la fecha real de nacimiento de Jesús es el 1 de marzo del año 7 (paradójicamente) a.C., teniendo en cuenta el fenómeno de la “Stella” de Belén, que no sería otro que la conjunción del Sol y la Luna escoltados por Júpiter, Saturno y Venus en la constelación de Piscis, mientras Mercurio se ubica entre Piscis y Acuario. En definitiva, cada ciencia busca con sus herramientas dar un panorama concreto de este hecho histórico, mientras las festividades siguen arraigándose en las culturas más allá de la veracidad de los eventos en los que se basan.
23 de Febrero de 2015
La verdadera búsqueda del arca perdida
Hace tres décadas un aventurero norteamericano llamado Danny Douglas llevó a cabo una larga travesía, digna de Indiana Jones, para dar con un arcón en el que se encontraban los restos de San Juan y otros santos. La elaboración de este arca, en 1225, fue encomendada por obispo de la ciudad belga de Florennes para guardar los restos de San Timoteo, San Apolinar, San Mauro y San Juan el Bautista. Luego de la Revolución Francesa, el arca fue adquirida por el duque de Beaufort-Spontin, quien la guardó en su castillo, en la República Checa; hasta que se desencadenó la Segunda Guerra Mundial. Cuando los soviéticos deportaron al duque este abandonó su castillo, pero antes escondió el preciado arca. En1984 Danny Douglas se encontró con un miembro de la familia Beaufort-Spontin, quien le develó el secreto del arca, y se prometió recuperar la reliquia. Viajó a la República Checa y pidió un permiso de excavación y recuperación de objetos. Este pedido llamó la atención de Frantisek Maryska, jefe de la policía secreta de la región, quien se vio tentado de encontrar aquello que Douglas buscaba. Para esto se valió de agentes secretos, entre ellos una mujer que intentó seducirlo para sacarle información… en vano. No obstante, Maryska no se resignó, siguió los pasos de Douglas y terminó adelantándose, descubriendo el arca 5 de noviembre de 1985. Él fue declarado héroe nacional, y Douglas fue injustamente olvidado hasta el año 2003, cuando se le envió una carta desde el ministerio checo de cultura afirmando que se le reconocía su participación en el descubrimiento
MARÍA MAGDALENA
Se destaca en: Apóstol de Jesús - La Biblia
País: Magdala - Galilea
Uno de los personajes bíblicos más conocidos es María Magdalena, quien se describe en el Nuevo Testamento como uno de los discípulos más fieles de Jesús.
Las fuentes sobre su vida son los evangelios canónicos y también los apócrifos * **. Su primera aparición se hace en Lucas (8: 2), donde la narrativa informa que Cristo echó fuera siete demonios de ella y, como consecuencia, se convierte luego en una de las mujeres que lo acompañan y siguen.
Magdalena aparece firme en los momentos más cruciales de la vida de Jesús. Estuvo presente en la crucifixión y en su funeral, junto con María de Nazaret y otras mujeres.
La Biblia nos dice que el sábado después de la crucifixión, Magdalena dejó el Calvario hacia Jerusalén para comprar un perfume con el fin de preparar el cuerpo de Cristo cómo era la costumbre funeraria de la época. Ella permaneció en la ciudad durante el sábado y al día siguiente, "cuando todavía estaba oscuro", fue al sepulcro y lo encontró vacío. Allí, recibió de un ángel la noticia de que Cristo había resucitado y se le dijo que debía informar de ello a los apóstoles de Cristo. Después de este episodio, no hay más citas sobre ella en la Biblia.
María Magdalena es considerada santa por la Iglesia Católica Romana, Ortodoxa, Anglicana y Luterana, celebrando el día 22 de julio en su honor. Las iglesias ortodoxas orientales también la conmemoran, pero en el segundo domingo después de Pascua.
Si bien nada puede decirse sobre María Magdalena con relativa certeza, muchas leyendas han surgido en torno a su figura. Según una antigua tradición de los antiguos cristianos de Oriente, María Magdalena fue acompanhada por Juan y María, madre de Jesús, a Efeso, donde murió y fue sepultada.
Otra antigua leyenda, que la confunde con María, hermana de Lázaro, dice que viajó a Marsella, Francia, con Marta, Lázaro y otros para evangelizar la región. Según esta leyenda, ella pasó 30 años de su vida cumpliendo penitencia en la cueva de La Saint-Baume en los Alpes hasta poco antes de su muerte.
Algunos escritores y estudiosos contemporâneos se refieren a Magdalena como la esposa de Cristo, afirmando incluso que llegó a tener hijos com Jesús. Según esta teoría, este hecho habría sido escondido por los cristianos revisionistas que han tergiversado algunos pasajes de los Evangelios. Estos escritores tejen sus teorías a partir de los cruces de información de los Evangelios Canónicos con los escritos apócrifos y gnósticos.
A través de los siglos, el arte cristiano ha representado a María Magdalena a través de la escultura y la pintura, como una mujer con el pelo largo y un frasco de aceite en sus manos.
Pero lo que la hizo famosa, es la creencia de que hubiera sido una prostituta que fue transformada por la palabra de Cristo. Curiosamente, en ninguna parte de la Biblia (e incluso en los evangelios apócrifos) se dice que María Magdalena habría sido una prostituta o una pecadora.
La autoría de esta idea se puede atribuir a los líderes y los seguidores de la Iglesia Católica en su inicio, que permitió y fomentó la confusión entre la historia de María Magdalena y las otras Marías y mujeres mencionados en la Biblia. Algunos sostienen que dicha idea tiene como uno de sus principales objetivos desacreditar a las mujeres y mantenerlas alejadas del clero.
* Evangelios canónicos son los libros del Nuevo Testamento aceptados como legítimos en la mayoría de las religiones cristianas. Comprende a los evangelios de Mateo, Marcos, Lucas y Juan.
** Los libros apócrifos cuentan historias e información que divergen de la doctrina establecida por la Iglesia Católica en sus comienzos. Muchos de estos textos fueron considerados heréticos y por lo tanto excluidos de la Biblia. La mayoría de ellos consisten en cartas, narraciones y profecías que se ocupan de la vida de Jesucristo y sus seguidores. Algunos también tienen diferentes versiones de los hechos narrados en el Antiguo Testamento, por ejemplo, la creación del mundo.